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| Imagen tomada de http://www.revistambp.com/noticias/MBP32371365/los-superheroes-del-sanguche/ |
Ellos son los enmascarados de la milanesa, los paladines del “completo sin ají”, los defensores de los fines de semana con amigos, ellos son los Críticos del Sánguche.
El sánguche de milanesa es un ícono de la gastronomía regional y muy especialmente de la tucumana. Comerlo es un evento social, ya que raramente se encuentra a alguien que lo haga solo. Utilizando la “milaseñal” logramos contactarnos con los expertos de la comida sanguchera.
Cada fin de semana ellos se reúnen en una sanguchería tucumana y degustan con detenimiento y máxima objetividad uno de los platillos que tanto caracterizan a nuestra provincia. Todo este trabajo es volcado luego en su blog, en dónde encontramos decenas de sangucherías calificadas con sus respectivas fichas técnicas.
Para conocer un poco más de estos anónimos personajes leé la entrevista que logramos hacerles.
¿Cómo surgió la idea de los críticos del sánguche?
La idea surgió en charlas de café. Con un grupo de amigos, teníamos la idea de hacer un programa de radio que incluyera una sección dedicada a la crítica de sangucherías. Queríamos decirles a los oyentes a qué lugar ir y dónde estaban los mejores sánguches. Al final la idea derivó en un blog, porque por ese medio podemos explayarnos y dejar disponible cada crítica, para que los amantes del sánguche puedan elegir entre varias opciones cuando lo deseen.
¿Qué se siente tener identidad secreta?
La idea de tener una identidad secreta la implementamos para poder realizar las críticas como cualquier comensal más.
De esa manera, cada vez que llegamos a una sanguchería podemos observar con tranquilidad el movimiento del lugar, las instalaciones y todo lo necesario para elaborar una crítica. Después, escribimos bajo seudónimos porque nos interesa mantener ese perfil anónimo, que creemos, sirve para seguir una línea de objetividad.
¿Alguna vez los reconocieron en alguna sanguchería?
Sí. Una vez fuimos a un local y comenzamos a notar que el dueño nos trataba más cordial de lo que se acostumbra. Hasta nos trajo algo para picar antes de que lleguen los sánguches. Ahí comenzamos a sospechar. Hasta que una vez que publicamos la crítica en el blog, leímos un comentario del dueño que nos agradecía por haber ido y que sabía que éramos nosotros. La verdad nunca supimos cómo se enteró.
¿Cuántos integrantes tiene el equipo?Somos tres los integrantes. El erudito del sangüi, San Guchazo y Amante de la comida 53. Pero contamos con un suplente que también suele sumarse a las recorridas. El critica bajo el seudónimo El Sanguchólogo.
¿Cuantas sangucherías, bares y restaurantes recorrieron hasta hoy?
Llevamos analizados 49 locales entre sangucherías y bares. Desde hace un tiempo hemos parado las recorridas pero en breve largaremos de nuevo. De los 49 locales la enorme mayoría son sangucherías y el resto bares que venden sánguches. Aún faltan locales de renombre por analizar, porque cuando nacimos con este blog la idea fue ir a lugares poco populares para darlos a conocer en el medio.
¿Cuál fue la mejor y la peor experiencia como críticos de comida? Todas son buenas experiencias porque nos permiten conocer lugares, costumbres, entre otras cosas. En ese marco, la peor experiencia en particular fue una vez que fuimos a un lugar con cierto renombre y nos encontramos con poca variedad de productos y mala calidad. Las mejores experiencias son aquellas en las que encontramos un gran producto sin antes haber siquiera sospechado. Nos ha pasado que fuimos con pocas expectativas a un lugar y nos dimos con un gran sánguche.
¿Cuál es el lugar que ocupa el sánguche de milanesa en la sociedad tucumana?
En Tucumán, el sánguche de milanesa ocupa un lugar muy importante y, a mi entender, es un fenómeno digno de un análisis sociológico. Los orígenes están más bien relacionados con la clase trabajadora, pero hoy en día es un plato que lo come desde el más humilde hasta el más adinerado. Sin dudas que forma parte de la dieta del tucumano promedio, eso explica la gran cantidad de sangucherías que existen en la provincia, como así también, que bares y restaurantes lo incluyan en sus cartas.
¿Cuáles son las características que debe tener un sánguche para ser tucumano?
Son muchas las características que dan forma al sánguche tucumano. Para empezar, la milanesa debe ser freída al momento en que uno la encarga. El pan sanguchero tiene que estar semitostado y debe llevar mayonesa, mostaza, lechuga y tomate.
Obviamente que acá juegan los gustos de cada uno, pero esa es la típica composición.
Hay gente que lo prefiere con ají (picante) y con algunas verduras que varían según el local. Un claro ejemplo de esto fue la cebolla cruda o cocida de “Chacho”. Desde hace tiempo existe la posibilidad de los agregados de jamón, queso y huevo pero nosotros si bien no estamos en contra creemos que no forman parte del sánguche tradicional.
También es justo mencionar que si bien ha crecido el número de sangucherías muchas tienen características “industriales” que se asemejan a las casas de comida rápida extranjera. Hemos notado las mismas milanesas en distintos locales, como así también cada vez menos hamburguesas caseras. Eso sin duda va en contra de la esencia sanguchera que nosotros intentamos reivindicar.
¿Aparte del sabor, qué hay que tener en cuenta para salir a comer un sánguche de milanesa?
Eso depende de qué busca cada uno. Por supuesto que lo más importante es la calidad del producto, pero muchos se fijan en las comodidades de las instalaciones. Hay un segmento que elige a las sangucherías, por ejemplo, para comer, tomar una cerveza y ver un partido de fútbol. Nosotros apuntamos a aquellos locales en donde se ve cierto tipo de elaboración casera.
¿Les gusta el sushi?
A dos de los tres críticos nos gusta y nada más. No es una comida que forme parte de nuestra dieta. Aunque el sushi cada día gana más adeptos nosotros no dejamos de verlo como una comida ajena a nuestras costumbres.
¿Qué opinan de la expo milanga?
Nos parece una muy buena iniciativa. Celebramos que existan personas que trabajen para reivindicar a un producto y a una costumbre tan tucumana. Eso sí, para nosotros el evento tendría que ser en un lugar físico adonde concurran distintos sangucheros, al igual que se hace con la fiesta de la empanada y tantas otras más. Pero entendemos que para eso se requiere de una buena inversión.
“En Tucumán, el sánguche de milanesa ocupa un lugar muy importante y, a mi entender, es un fenómeno digno de un análisis sociológico”
¿Cómo son los sánguches de milanesa en otras provincias?
El sánguche de milanesa en otras provincias es muy distinto. Sobre todo en las provincias alejadas de Tucumán. En el norte hay buenos sánguches pero no existe el fenómeno tucumano, por decirlo de alguna manera. En locales de Buenos Aires, por ejemplo, los tienen preparados y amontonados fríos en mostradores. ¡Es un crimen! Además el pan, la verdura y los aderezos son distintos. No existe una tradición alrededor del sánguche. Es una comida más.
¿Así como hay un mundial del asado, se viene el mundial del chegusán?
Sin dudas que sería un sueño que exista un mundial en el cual Tucumán participe con el sánguches de milanesa. Yo creo que más allá del producto en sí, lo que también le llama la atención al foráneo es la forma de preparación, que además de ser pintoresca, es en tiempo real. Sería cuestión de competir con un sánguche de calidad y con sangucheros habilidosos, como los que trabajaban en “Chacho”. ¿Creen que le falta publicidad al sánguche y a las sangucherías? Sin dudas que sí. Quizás suene exagerado, pero una buena estrategia de marketing podría posicionar al sánguche de milanesa como un atractivo turístico. Todos tenemos algún amigo o familiar de algún punto del país que siempre que viene a Tucumán aprovecha para comer una “mila”, pero lo hace más que nada por nuestra recomendación. Sería bueno que exista una promoción planificada.
Fuente: http://www.revistambp.com/noticias/MBP32371365/los-superheroes-del-sanguche/
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